jueves, 20 de septiembre de 2007


CAMINOS

Espero la llegada del momento,
No se que es lo que viene al día,
Menos siento la sensibilidad del tiempo,
Aunque injusta sea la espera anhelada.

Ni siquiera puedo ver que es lo que se asoma,
O gran destino dime que camino tomar,
Necesito llegar a la salida de este laberinto,
Para no perderme en la oscuridad.

Que gran desfachatez me esta sucediendo,
Solo quisiera saber de que me culpan ahora,
No puedo ni siquiera dar un paso atrás de mí,
Por que si es así caeré en lo inevitable.

Me siento enjaulada a morir de desesperación,
Me hunde cada vez más este martirio maldito,
Solo se que debo seguir sin detenerme a nada,
Se muy bien que algún día encontrare la razón.

Y aunque me esfuerce más aun creo tenerlo,
Pero no logro amarrarlo desde el interior,
Creo que aun no encuentro la llave para abrirlo,
Por que no se donde comenzar a buscarla.

Creo que la única solución es refugiarme en la noche,
Y que esta me envuelva en su gran manto acogedor,
Pero tendré que tener cuidado en no quedarme dormida
En un sueño profundo en la eternidad.

Se que tengo la solución para ganar una vez,
Esta batalla es como todas las otras luchadas,
Aunque cada una tiene un dolor diferente,
Necesito cubrirme con una gran armadura.

Dios dame fuerzas para poder levantarme,
Dame aliento para poder llenarme de vida,
Hazme sentir que nunca estaré sola a tu lado,
Solamente te pido una pequeña esperanza.

Busco sin cesar a mi pálida y escasa sombra,
A la que siempre ha estado a mi lado en todo,
Necesitare que alguien me avise del peligro,
Que me cuide y proteja de todos los males.

Solo os pido a vosotros que tenga piedad,
Que me levante tal castigo que ha sido eterno,
Os juro no volver a tomar el mismo camino,
Más aun regresare al comienzo nuevamente.

Dejadme llevar un poco de tu roció especial,
Tener nuevamente ese aroma angelical en mí,
Sentir de cerca la vida misma lejos de ti,
Y volver a estar sola en la laguna celestial.

Quiero dejar mi vida a cambio de un beso,
Aferrarme a la idea de sobrevivir por la pasión,
Cruzar cualquier obstáculo por tus brazos,
Y perderme en el infinito de tu mirada.

No entiendo cual es la causa de tanta desdicha,
El por que de tanta maldita ansiedad de acabar,
Los senderos invadidos por falsos profetas,
Que a su vez hacen que terminen en tragedia.

Ya no soporto tanta hipocresía realista,
Evado pantanos de muchas trampas mortales,
Día a día es tan grande la necesidad aun más,
Que a su vez mata la pobre fe que aun queda.

Más aun no creo necesitar de ayuda extra,
Solo seria un poco de cada mano solidaria,
Quiero terminar esto sola sin más nadie,
No me gustaría encubrirme con mantos puros.

De los cuales son pocos en estos tiempos,
Será extraño saber de donde escoger alguno,
Por que no cualquiera mantiene esa luz,
Esa atracción tan penetrante que te arrastra.

Se que aun necesito soltar todos los sueños,
Los cuales me han recibidos gentilmente,
Aunque me ha costado entrar por sus puertas,
Que cada ves son más angostas y pesadas.


OH sereno aire sagrado venid por mi,
Ya que el amor me hirió con bellos ojos,
Solamente os pido escuchadme un momento,
Que solo vosotros oíd mis palabras doloridas.

Si esto ha de ser mi destino,
Y que de esto dependa el cielo,
Me queda solo pedir al amor,
Que cierre mis ojos sollozantes.

Que el viento se lleve mi alma desnuda,
Y que deje tendido ahí mi cuerpo miserable,
La muerte será menos dura si así la espero,
Que con su dudoso paso se lleve al fin
Este espíritu tan tristemente manipulado.

Nunca podría estar en puerto más sereno,
Ni en más tranquila fosa deshabitada,
Que en claras y dulces aguas de recuerdos,
Pues de estos mismos me aferraba aun más,
Como gentil rama en el que halle apoyo.

Recuerdo que llegue en un tiempo
En que ya usado el sitio,
Logre tocar a la apacible fiera,
Donde me prendiera aquel bendito día.

Amor le inspire de forma que solloce,
Tan dulcemente que merced me implore,
Y del cielo solo me venga un suspiro,
Del cual llovía flores para su cuerpo.

En mis ilusiones fui mil veces la más rica,
Fui más avara que el mismo infierno,
Por que poseía todos los talentos,
Los cuales se me fueron acabando día con día.
Nunca quise mostrar mis grandes tesoros,
Con los cuales mi vida fue placentera.

Ya es suerte que mi sufrimiento no sea mayor,
Mi vida no fue más que locuras suaves,
De ahora en adelante es solo lamentar,
Todo esto hace que añore menos al mundo.
Decidme si estoy ya fuera del mundo,
Ya no escucho sonido ni tacto alguno,
Las mañanas, tardes y noches, los días……

Debería ya dárseme un infierno para la cólera,
Un infierno donde pueda disolverme para siempre,
¡Ay que cansada me siento! solo me dejo llevar
En el infierno de una calida y sutil caricia.

Este veneno de un beso mil veces maldito,
Por que es mi debilidad, la crueldad del mundo
Dios mió, piedad os pido, y escondedme,
Que me estoy sintiendo demasiado mal.
Por que estoy escondida y no lo estoy.

Quería soñar a un hombre,
Soñarlo con integridad minuciosa,
E imponerla en esta realidad.
Este proyecto mágico me había agotado
El espacio entero de mi alma.

Me convenía ese templo inhabitado y despedazado,
Por que era un mínimo mundo visible del realismo,
En el cual al principio, mis sueños eran caóticos,
Pero poco después fueron de naturaleza dialéctica.


Vivo en conversación con mis difuntos recuerdos,
Y escucho con mis ojos internos a los ya muertos,
Pido a los santos del cielo que ayuden a mis pensamientos,
Les pido que refresquen mi memoria
Y aclaren mi atrapado entendimiento.
Solo os pido me asistan en esta ocasión ruda.

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